domingo, 23 de febrero de 2014

Casa Tanque, Bélgica


¿Cuántas personas que desean mudarse de su casa, y establecer un hogar propio, optan por lugares clásicos, con construcciones tradicionales, sin salirse de lo habitual? La respuesta es: muchas, muchísimas en todo el mundo. Es por esta razón que el artículo en cuestión resultará tan llamativo.

En Bélgica, donde el estilo gótico a nivel arquitectónico ha dejado su huella, no es muy usual darle paso al ingenio que permite crear algo deslumbrante, y a la vez económico, que sin caer en vaticinios, podría llegar a marcar una tendencia mirando hacia el futuro. 

Es que existe una casa que se ubica nada más ni nada menos que en un tanque de agua, cumpliéndose así el capricho de una persona que contemplaba la idea de aprovechar este tipo de construcciones desde pequeño, teniendo en cuenta que en muchos casos no cumplen una finalidad determinada, debido a que han sido reemplazados por otros elementos referentes al saneamiento.





Esta maravilla, producto de la intuición en su más amplia extensión, posee cinco niveles, por los cuales se puede transitar, y al mismo tiempo darse cuenta de lo que la imaginación es capaz de generar en el paisaje. Varios dormitorios, una sala de estar, un baño, un caurto de almacenamiento, y un garaje, son algunos e los ambientes que se pueden hallar dentro de esta edificación que verdaderamente escatima en gastos, pero no en sorpresas.


Hay una gran cantidad terrenos abandonados en todo el mundo, con proyectos edilicios incompletos, que perduran con el tiempo sin que alguien intervenga en su destino. Pero, por suerte, hay sueños, fantasías, ilusiones, y sobre todo, mucho empeño. Solo eso se necesita para confeccionar lo que puede llegar a ser nuestro espacio.

Redacción: Nicolás Oroño

jueves, 13 de febrero de 2014

Somewhere Cafe


De estética fresca y cálida, con grandes pinceladas handmade e inspirado en el estilo del Soho neoyorkino, así es Somewhere Café, ubicado en Sant Cugat (Barcelona).

Somewhere Café está especializado en el Brunch, ofrece un muy buen café y otras delicatessen. Todo con productos de primerísima calidad y servidos con mucho amor.

Su diseño deja al descubierto la esencia del local. Su carácter industrial con paredes en obra vista y las luminarias e instalaciones en superficie, se endulza  con la cálida madera.




Somewhere Cafe cuenta con dos plantas distribuidas de manera que invita a sentirse como en casa. En un recorrido cerrado puedes conocer toda su primera planta, pasando por sus salas y la zona de trabajo que te dirige al lavabo (que con una perfecta pica de mármol macael, griferia de lineas puristas y baldosas hidráulicas en una pared, no decepciona!).






Si quieres saber qué hay para desayunar o merendar puedes mirar en el hueco que han dedicado a exponer sus exquisiteses. Allí te sientes como Alicia en el País de las Maravillas escogiendo entre una increíble carrot cake o unos scones deliciosos y caseros.




Apto para todas las edades, se ha pensado en un espacio para los más pequeños, con juegos y nubes incluidas. Un espacio delimitado por un tabique de madera con ventanas, perfecto para la tranquilidad de los padres.



Cabe destacar el diseño de las mesas, total handmade, y una especie de estructuras de madera que visten las paredes aportándoles un toque de luz y distinción, como si de grandes cuadros se tratase. Estas estructuras se convierten en el cabezal de la mesa principal que preside la entrada, que bien podría considerarse una barra-isla, o de una pequeña mesa a modo de repisa. Un recurso muy limpio y funcional.



En la planta superior Somewhere Café dispone de una sala para eventos y talleres. En esta sala reinan dos elementos: una lámpara de lo más natural y una mesa realizada con madera reciclada de la puerta original del local.



Tuve la suerte de coincidir en esta sala con Tanit, creadora y editora de la revista All Lovely Party, que estaba ambientando la sala con un gusto tan delicado que bien me hubiera quedado allí todo el día. 



Las flores en Somewhere Café no faltan y el personal es excelente, desprende un espíritu positivo que es de agradecer.



¿Se puede pedir más? Si… una terraza!! Están trabajando en ella y tengo el gusto de saber que tiene todos los papeles para ser perfecta.

Hay pequeños grandes lugares en la historia de tu vida a los que siempre querrás regresar, Somewhere Café se ha convertido en uno de los míos.


Proyecto de reforma: 
Anna Garcia de L'obrador. Arquitectura i paisatge
Blanca Oliveras de www.ejof.es

Sant Antoni, 58, 08172 San Cugat del Vallés

viernes, 7 de febrero de 2014

SOPHIA WEBSTER, fantasía al poder



Sigo por tierras londinenses, esta vez en un pequeño mundo de fantasía: étnico, de purpurina, con topos, mariposas, lleno de colores y entrelazados, elegante o extravagante.

Una de las muchas tiendas encantadoras de Covent Garden que me llamó especialmente la atención es la zapateria de Sophia Webster.

Sophia Webster es una diseñadora reconocida y galardonada el pasado mes de diciembre de 2013 con el premio British Fashion Award a Mejor Diseñador Joven de Accesorios de manos de Suki Waterhouse.

La diseñadora deja que la imaginación y la realidad vayan de la mano, creando zapatos y accesorios que parecen sacados de cuentos mágicos, donde todo es posible.

La tienda en sí posiblemente me atrapó porque a pesar de ser de noche en el exterior, en su interior era como entrar en el paraíso de las Barbie’s sesenteras: neón, flamencos y flores (una lástima que no sean reales, aunque a su vez resultaría una locura que lo fuesen!).







No es un espacio con una increíble solución espacial, pero su decoración que te vuelve a convertir en niña caprichosa y consentida es de lo más adorable.

Una vez en el interior se lee cual es la esencia de este pequeño espacio creado para soñar, y por qué te encuentras allí rodeada de flamencos:

Flamboyance. Noun flam·boy·ance
1 [of person, behaviour] extravagant elaborateness; an intention to be noticed.
2 the collective noun for a group of flamingos: a flamboyance of flamingos.

Sophia Webster alimenta las ilusiones, y eso me encanta.